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miércoles, abril 02, 2008

Schwarzfahrer: el pasajero negro

Una de verdad:

Hace unos días estoy colaborando en un trabajo que tiene que ver con las comunidades afrocolombianas en una ciudad muy conflictiva de este país. Por lo tanto he estado más receptivo que de costumbre a este tema. El día de hoy, una serie de posts y una información por twitter me ponen sobre aviso en el tema del racismo.

El primer post me llegó por referencia de La Petite Claudine y dejaba muy clara la pregunta por si el racismo está en nuestra mirada pervertida o no, cuando ella rastrea un artículo sobre una de las portadas de Vogue en las que aparece LeBron James y Gisele Bündchen y cómo la crítica la asoció a una famosa imagen del cine.


Por favor, hay que ser muy retorcidos para hacer este tipo de asociaciones. Casi me voy para atrás cuando dicha imagen del cine aparece asociada a una cuestión mucho más macabra, relacionada en una mezcla entre la moral y el machismo en la cultura pop española, reseñada por El blog ausente. Las viñetas (favor ver las viñetas en el anterior link) que reseña este blog valen la pena, y en ella encontramos como la figura del King Kong aparece en una cartilla erótica de los años 70 a devorar un par de lesbianas, como si la figura que castiga el pecado fuera el imaginario machista.

No me repongo de estos golpes cuando por twitter, gracias a cine al oído, me entero de un cortometraje reseñado como El pasajero negro, al parecer ganador del premio Oscar en 1994. En este cortometraje me queda claro que el racismo no está tanto en nuestra percepción como en nuestra falta de acción. Es curioso ver en el docuental cómo los comentarios racistas de una ancianita alemana pasan por los oídos de todos y naide escucha, así todos estén prestando atención. Me imagino que es lo mismo con el nacionalismo. El cortometraj es muy bueno y dura sólo unos 10 minutos:



Schwarzfahrer.(German.Kurzfilm)
Cargado por cinealoido

Después de esto me siento como si estuviera en medio del debate de si el libro Cómo leer al pato Donald es aún vigente o no.

No al racismo, No a los nacionalismos

y a los otros:

¡No pasarán!


P.D: de verdad que liberen a Ingrid. No es casualidad que sea en el mes de abril un día nefasto para la historia colombiana. Soy de la opinión de que un movimiento nacional de víctimas de todas las formas de violencia y de todas las formas de terrorismo es lo que necsita este país como brújula moral para detener la guerra. para mí, este movimiento sólo podría estar liderado por Ingrid. La crisis moral de este país tocaría fondo con su desaparición.

lunes, septiembre 10, 2007

Lecturas del Holocausto

“I realized that the first Holocaust pictures I saw, as one who grew up here, were of naked women,” said Ari Libsker (...)
Lectura 1: Mientras me encontraba leyendo esto y esto en el blog de absence, apareció una noticia en el diario El País que pronto se replicó en Colombia en el diario El Tiempo. La noticia hablaba de la aparición de grupos nenonazis en Israel. Cuando comentaba con Tánger lo extraño de la nota me acordé del blog de absence y sus posts sobre los Stalags: una especie de libros de bolsillo porno que, al parecer, se difundieron en la Israel de los 50 y en los que la experiencia del Holocausto se sublimaba en dibujos porno sadomasoquistas. El diario de NY Times recogió así una nota sobre los Stalags este 6 de septiembre.Lectura 2: Así reza la nota del Times en la traducción de Bluelephant y Absence.
"Los Stalags fueron practicamente la única pornografía disponible en la puritana sociedad Israelí de inicios de los sesenta. Desaparecieron de manera tan súbita como aparecieron. Tras dos años de edición, los retiraron de los quioscos que pueblan los alrededores de la estación central de buses de Tel Aviv cuando una corte israelí declaró a los editores culpables de difundir pornografía. Se acusó al Stalag más popular, "Yo fui la puta privada del coronel Schultz", de cruzar todas las fronteras de lo aceptable y se ordenó a la policía secuestrar hasta la última copia. Los Stalags dejaron de imprimirse y pasaron a la clandestinidad, circulando a través de tiendas de viejo y entre un furtivo grupo de coleccionistas".

Lectura 3: Mientras tanto, en Bogotá El Tiempo recogía ésta noticia.