Ganchos de oficina
Bueno, algún día iba terminar cometiendo un poema....
A las cuatro de la tarde,
las oficinas cansadas
descansan sus ojos de pantallas y ven,
tras los cristales sucios,
los árboles
sacudiéndose como perros, golpeados
por las borrascas de agosto,
dejando caer
sus hojas
rendidas
sobre las espaldas
sobre los hombros apresados
empujando al piso la mirada y los cuerpos
hacia donde se encuentran
atrapados por las fibras de un tapete manchado
uno, dos, o tres ganchos usados por alguna cosedora
para unir por unos instantes las cartas que su destinatario ya olvidó
con los memos
que otro funcionario escribió.
Y un rayo de sol atraviesa el viento y se mancha
con la sucia desesperanza del reflejo del cristal
Y hace brillar de nuevo el metal de los alambres retorcidos
como el sol de viejos días
Y el recuerdo abandonado
Se pregunta por el dios que le dio vida
Y la cosedora transita de mano en mano
como un pañuelo en la escena del crimen
que no logra retener las lagrimas dolientes
4 comentarios:
La oficina te tiene traumatizado, Mazo. La otra semana si va tocar pasar por la U para sacarte a dar una vueltica...
Más que la oficina es la muerte de Bolaño, pero quién sabe, igual ese tema ya lo habpia vivido hace un año, así que la sensación es vieja, por acá nos vemos, ah, eso de la vueltica suena a mascota y tampoco estoy tan en la inmunda. :)
No no no ...lo de la vueltica es una manera coloquial de invitarte a tomar un cafecito...tu todo lo tomas a mal...jajajajaja...ahí estás pintado....jajaja...
No te la dejas montar...Saluditos
Ahh...yo nunca he tenido el placer de leer a Bolaños, así que con respecto a eso soy una total ignorante. Lo siento.
Y si, desde los 16 años soy fanatica de lágrima en el ojo y foto en la pared de Tool. Tengo todos los cds (originales) y me sé la vida, obra y gracias de los músicos de la banda. Toda una fan enamorada...
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